Este peculiar valle se recorre durante la etapa nº 23 de la Gran Senda de Málaga, por lo que se encontrará información detallada en ella. Las ruinas de la torre de Lifa en su parte alta y la espectacular formación de cornicabras (Pistacia terebinthus) hacen de este valle un lugar muy especial, principalmente en otoño, momento en el que se viste de rojo.
